La experiencia profesional en tu CV
El CV incluye varias secciones, entre ellas la más central: la experiencia profesional.
Como su nombre lo indica, la experiencia profesional incluye todas las profesiones en las que has trabajado a lo largo de tu carrera.
Es la referencia principal con la que cuenta tu posible empleador y lector de tu CV. Esta es la parte que más le interesa y también la que inclinará la balanza a tu favor o no.
La experiencia profesional en el CV: demuestra un progreso
Respecto a la presentación de la sección «Experiencias profesionales», es importante que tu evolución en los diferentes puestos y/o empresas muestre una progresión: jerárquica, salarial, en términos de habilidades... demuestra siempre que has llevado a cabo un progreso hacia un objetivo bien definido.
Por supuesto, en nuestros CV, a menudo contamos con experiencias que no forman parte de esta progresión que estamos ansiosos por demostrar.
En ese caso, hay dos opciones disponibles:
- Filtrar las experiencias profesionales más relevantes, ya que algunas pueden no ser relevantes para esa progresión. Que no te dé pena «olvidarte» de algunos puestos, ya que podrían no contribuir a que te contraten si no coinciden con tu objetivo actual.
- Presenta cada una de estas experiencias de tal forma que demuestren que has progresado hacia tu meta personal.
La experiencia profesional en el CV: la presentación
Para presentar una experiencia personal, debes nombrar al empleador, indicar el período durante el que trabajaste ahí, el título del puesto y las responsabilidades y logros obtenidos.
Estas dos últimas categorías son las que pueden permitirte «absorber» tus posiciones anteriores en la progresión que deseas mostrar a través del CV.
Puedes «distorsionar» ligeramente las experiencias para orientarlas hacia las responsabilidades que se exigen en el nuevo puesto que deseas, y del mismo modo con los logros.
La experiencia profesional en el CV: la selección
Además, no dudes en incluir experiencias profesionales menos tradicionales, como becas, trabajos de verano, capacitaciones profesionales o incluso algunos logros personales (en la sección «Otros» o «Varios» en la parte inferior del CV) que podrían ayudarte.
Debes concebir tu CV como un argumentario de todas las cualidades necesarias para cumplir con los prerrequisitos del puesto.
Por lo general, se considera que solo hay que incluir en un CV los últimos 10 a 15 años de experiencia.
Los otros se pueden resumir brevemente en una corta inscripción referente al «inicio de carrera» situada antes de la lista de experiencias profesionales.
Sin embargo, como se mencionó anteriormente, no siempre es necesario incluir todas las experiencias si algunas no son relevantes y, sobre todo, para una mayor organización y brevedad, puede ser interesante agrupar algunas de ellas a través en una frase corta:
- Experiencia como camarera en «X» de 2002 a 2004, en «Y» de 2004 a 2006 y como vendedora en la tienda «Z» de 2007 a 2008. Este proceso te ayudará a valorar las experiencias apropiadas y, por lo tanto, a presentar tu perfil.
La experiencia profesional en el CV: consejos
- Sé consistente en la presentación: los mismos saltos, el mismo espacio entre líneas, caracteres en negrita, cursiva, etc. para cada descripción de trabajo.
- En la descripción del trabajo, no enumeres únicamente las tareas una tras otra, selecciona solo lo que sea coherente con tu ambición profesional y destácalo.
- Describe tus responsabilidades con verbos de acción suficientemente fuertes como para demostrar lo que eres capaz de hacer. Un estudio realizado en 2017 mostró que los empleadores prefieren los CV que incluyan verbos relacionados con el sector al que pertenecen: realizar, negociar, crear, diseñar...
- Intenta cuantificar, en medida de lo posible, las progresiones que has materializado: aumento de la facturación en un 30 %, duplicación de clientes, etc.
La experiencia profesional en el CV: consejos para recién graduados
A menudo es difícil para un recién graduado escribir un CV gratificante y convincente, ya que cuenta con poca o ninguna experiencia.
Por lo tanto, puede ser tentador maquillar algunos detalles, algunos títulos o algunos términos contractuales.
¡Pero, ten cuidado! Tu CV puede caer en manos de un empleador muy exigente que compruebe todas tus referencias. La solución más simple es ir con la honestidad como bandera y valorarte: simplemente enumera las aptitudes que se esperan para el puesto a través de tus experiencias. Habla de las prácticas que has realizado en empresas y que incluyan aspectos importantes que puedas presentar durante una posible entrevista y no te olvides de las aptitudes esenciales para muchos empleadores (gestión del tiempo, sentido de responsabilidad, etc.).
Si piensas mencionar tus proyectos universitarios en la sección «Experiencia profesional», ten en cuenta que los empleadores no suelen darles mucha importancia, ya que estos proyectos les resultan demasiado teóricos.
La experiencia profesional en el CV: consejos para altos directivos
No presentes experiencias poco concluyentes, básate únicamente en datos cuantificables y muestra cómo cambió la situación desde que llegaste hasta que te fuiste. Lo que los empleadores quieren en tu caso es ver que seas operacional y que estés dispuesto a cambiar las cosas.